Hoy en día la tecnología nos rodea, tanto en casa como en la calle, la escuela, el trabajo, el médico... Nada queda fuera del alcance de la revolución tecnológica en la que vivimos. Quien más o quien menos tiene una televisión, o un simple despertador. Por no hablar de los teléfonos móviles que son cada vez más sofisticados, haciendo alago del avance de las tecnologías.
Claro está que estas nuevas tecnologías nos aportan una mejora en nuestro nivel de vida, nos facilitan muchas tareas para las que, por la prisa en la que vivimos, parece que no tenemos tiempo ni ganas. Por ejemplo: ¿Quién en su casa se detendría con unas varillas para batir clara de huevo hasta hacerla al punto de nieve, teniendo una fantástica batidora que lo consigue en apenas un par de minutos?¿Quién hoy en día se sienta tranquilamente a escribir un correo postal a un amigo que vive lejos, cuando con una llamada, un sms o un email es instantáneo y lo puedes hacer en cualquier lugar?
Es de agradecer que nos faciliten tareas, que nos ahorren tiempo, que nos permitan hacer cosas que antes no estaban a nuestro alcance. ¿Cuántas enfermedades son diagnosticadas a tiempo gracias al avance tecnológico? Debemos tener en cuenta que la tecnología en algunos campos es es muy necesaria, casi vital.
Por lo contrario creo que nuestra comodidad, junto con la tecnología pueden jugar en nuestra contra. Abusar de ella promueve el sedentarismo y la falta de iniciativa para hacer las cosas por nosotros mismos. Un ejemplo claro son los jóvenes de hoy día. Los chavales cada vez juegan menos en las calles, colegios, plazas, polideportivos, parques... Las videoconsolas y los videojuegos minan su imaginación. Ya no piensan en villanos y en héroes, los juegos los tienen incluidos, no salen a la calle a jugar a la pelota, echan un par de partidos cómodamente sentados en el salón de su casa. Ni siquiera necesitan estar en la misma casa, ¡pueden hacerlo On-line!
Pero no son sólo los niños los que caen en la trampa de la comodidad, todos lo hacemos. La gente cada vez lee menos, ¿para qué leer si es más rápido ver la película y encima no tienes que imaginar tu a los protagonistas? De una manera u otra todos pecamos un poco a la hora de utilizar en exceso las nuevas tecnologías
Un ejemplo gráfico sería el de los dibujos animados Doraemon, en el cual el protagonista siempre recurre a su amiguito del futuro para que con un aparato tecnológico le ayude a solventar sus problemas del presente.
En el siguiente vídeo podemos ver que en el anuncio del coche lo único nuevo que venden es que lleva incorporadas pantalla de Tv, para que los niños ven películas durante los viajes. ¿Quíen pensaría hace 30 años tener televisión en el coche?
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